DIRECTOR: Fabián Bielinsky
GUIÓN: Fabián Bielinsky
MÚSICA: César Lerner
FOTOGRAFÍA: Marcelo Camorino
REPARTO: Ricardo Darín, Gastón Pauls, Leticia Brédice, Tomás Fonzi, Elsa Balaguer, Celia Juárez, Antonio Ugo, Alejandro Awada, Ignasi Abadal, Óscar Núñez, Leo Dyzen
ARGENTINA, 2000, 114 min.
SINOPSIS: Buenos Aires. Algo une a Juan y Marcos, dos estafadores de poca monta que casualmente se ven envueltos en un asunto que les puede hacer millonarios: tienen menos de un día para realizar una estafa que no puede fallar. (FILMAFFINITY)
OPINIÓN: Fabián Bielinsky (el director) se sentó un día frente a frente con Fabián Bielinsky (el guionista). Fabián, el guionista, empezó a contarle a Fabián, el director, la historia de dos tramposos que se conocen circunstancialmente y empiezan a trabajar juntos. A medida que Bielinsky, el director, va conociendo la historia y la va visualizando, Bielinsky, el guionista, le va embrollando con mentiras, o falsas verdades, que intrigan a Fabián, el director, que confía plenamente en Fabián, el guionista. Bielinsky, el director se decide a realizarla convenciendo previamente, no se sabe como, a una productora de la Patagonia que, como está lejos, no se acaba de enterar de lo que traman Fabián el director y Fabián el guionista. Pero para esos dos personajes se necesitan dos actores, algo canallas, y no muy conocidos, pero que sepan dar el pego (nunca mejor dicho), como Ricardo Darín y Gastón Pauls. Lo que no se esperaba el director es que estos dos actores, muy buenos por cierto, iban a entrar en el juego y engañar al director y al guionista llevando a los espectadores por donde les parecía mejor. Menos mal que Fabián había escrito un guión muy sólido, quiero decir muy bueno, buenísimo; y Fabián sabía dirigir con mano maestra todos los elementos de una película. Y así, entre los cuatro, sin “engañar” al espectador, consiguen una obra perfecta que no debéis perderos. Como habrá gente que la haya visto y gente que no la vaya a ver, os voy a contar el final: en esto que… bueno, lo dejo para otro día. Entre la gente que la ha visto está Father Caprio que, sabiendo que le ha gustado, me extraña que no la utilizara como novena uva del año 2009, en vez de “Nueve cartas a Berta”, sobre la que ya había dado mi opinión en esta habitación, el 15 de Noviembre de 2008.
GUIÓN: Fabián Bielinsky
MÚSICA: César Lerner
FOTOGRAFÍA: Marcelo Camorino
REPARTO: Ricardo Darín, Gastón Pauls, Leticia Brédice, Tomás Fonzi, Elsa Balaguer, Celia Juárez, Antonio Ugo, Alejandro Awada, Ignasi Abadal, Óscar Núñez, Leo Dyzen
ARGENTINA, 2000, 114 min.
SINOPSIS: Buenos Aires. Algo une a Juan y Marcos, dos estafadores de poca monta que casualmente se ven envueltos en un asunto que les puede hacer millonarios: tienen menos de un día para realizar una estafa que no puede fallar. (FILMAFFINITY)
OPINIÓN: Fabián Bielinsky (el director) se sentó un día frente a frente con Fabián Bielinsky (el guionista). Fabián, el guionista, empezó a contarle a Fabián, el director, la historia de dos tramposos que se conocen circunstancialmente y empiezan a trabajar juntos. A medida que Bielinsky, el director, va conociendo la historia y la va visualizando, Bielinsky, el guionista, le va embrollando con mentiras, o falsas verdades, que intrigan a Fabián, el director, que confía plenamente en Fabián, el guionista. Bielinsky, el director se decide a realizarla convenciendo previamente, no se sabe como, a una productora de la Patagonia que, como está lejos, no se acaba de enterar de lo que traman Fabián el director y Fabián el guionista. Pero para esos dos personajes se necesitan dos actores, algo canallas, y no muy conocidos, pero que sepan dar el pego (nunca mejor dicho), como Ricardo Darín y Gastón Pauls. Lo que no se esperaba el director es que estos dos actores, muy buenos por cierto, iban a entrar en el juego y engañar al director y al guionista llevando a los espectadores por donde les parecía mejor. Menos mal que Fabián había escrito un guión muy sólido, quiero decir muy bueno, buenísimo; y Fabián sabía dirigir con mano maestra todos los elementos de una película. Y así, entre los cuatro, sin “engañar” al espectador, consiguen una obra perfecta que no debéis perderos. Como habrá gente que la haya visto y gente que no la vaya a ver, os voy a contar el final: en esto que… bueno, lo dejo para otro día. Entre la gente que la ha visto está Father Caprio que, sabiendo que le ha gustado, me extraña que no la utilizara como novena uva del año 2009, en vez de “Nueve cartas a Berta”, sobre la que ya había dado mi opinión en esta habitación, el 15 de Noviembre de 2008.
5 comentarios:
Una película que no necesita grandes alardes para disfrutarla. En verdad una gran película. Y haces bien en no destripar el final, para que los que se decidan a verla gocen de ella en todos los sentidos.
Un abrazote.
La disfrutamos hace años en plena efervencencia del cine argentino que nos llegó a España a finales de los 90, principios del 2000. El problema es el empacho de Ricardo Darín que sufrimos, pero nada grave...
Me reí mucho con tu comentario acerca de Vivien y Miss Danvers. pero ¿no te hubiera parecido una genialidad que el cuadro de Rebeca, o sea la 1ª Sra. de Winter, hubiese tenido el rostro de Vivien?
Efectivamente esta película lo tiene todo para ser la novena uva cinematográfica. Pero como dice aquello "Solo puede quedar uno...".
En cualquier caso estamos en Septiembre y ya están empezando a madurar las uvas del 2010.
Nueve reinas es un film magnífico. Sorprendente en todos los sentidos. Y hasta ahí puedo decir...
Y de una tierra hermana y absolutamemnte entrañable: Argentina
Ya, estoy de acuerdo contigo: lo que llevan a los Oscars últimamente no necesariamente es lo mejor, pero ya se sabe que esos premios tienen mucho politiqueo (y cada vez, al menos para mí, menos credibilidad, porque no entiendo que no nominaran a casi nada "Revolutionary Road").
Por cierto, me encanta tu blog, voy añadirlo a favoritos. Y que sepas que estoy totalmente contigo tanto en tu valoración sobre "Benjamin Button" (yo incluso fui más duro con ella en mi blog) como con "Antichrist".
Saludos.
Una película sencilla que se disfruta mucho. El final, para los que la estábamos viendo, era previsible, pero haces bien en no contarlo, que es mejor descubrirlo según van la peli.
Saludos
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