08 marzo 2013

JOHN FORD - LEGADO TRÁGICO


Veía que era un muchacho que estaba luchando por conseguir algo, no como la mayoría, que solo estaban allí para ganar dinero fácil. El “Duque” era realmente ambicioso y estaba dispuesto a trabajar. Al cabo de un mes o seis semanas ya éramos amigos, y yo solía darle consejos y ofrecerle algún pequeño papel de vez en cuando. (Declaraciones de John Ford sobre John Wayne)

Ford utiliza una historia melodramática ambientada en el país del que emigraron sus padres para hacer uso de un expresionismo que por esos años hace furor en Hollywood debido a la gran afluencia de directores alemanes que llegan a la meca del cine y al éxito que obtienen con sus películas. Es el caso de Murnau y su “Amanecer” de la que Ford dijo que era la mejor película que había visto. La fotografía es de George Schneiderman y eso le da un aliciente añadido a la visión de esta película que por otra parte solo ofrece un hito más en el progreso de la filmografía de Ford. Aquí se pueden encontrar ciertos momentos característicos del director ya vistos en alguna película anterior y que después se repetirán y desarrollarán en películas posteriores: como un personaje queda al margen de la felicidad que ha provocado. En un viaje que Ford hizo con su mujer por Europa llegó hasta la tierra natal de sus padres, Irlanda, y allí filmó varios planos de una carrera de caballos que utiliza en esta película. Eso, más la ambientación de la historia en Irlanda, puede ser también algo que aumente el interés por la visión de este enrevesado melodrama, donde los personajes no acaban de estar definidos. Y es una lástima porque aquí cuenta con cuatro actores muy buenos. Como curiosidad, es la primera película en la que John Wayne, un apuesto joven de veintiún años, trabaja para John Ford interviniendo en dos escenas: como un hombre que va a ser ahorcado y como espectador entusiasmado que derriba una valla en la carrera de caballos. Realmente el trabajo de John Wayne era como encargado de atrezo en los estudios donde rodaba Ford. Se inicia aquí una extraña y larga amistad entre el director y el actor, y que ha sido interpretada de muy diferentes maneras por los estudiosos de John Ford o de John Wayne.

04 marzo 2013

JOHN FORD - CUATRO HIJOS


Después de ver los copiones de “Amanecer”, Ford ha declarado que cree que es la mejor película jamás filmada. Ford afirmó que duda que se haga una película mejor que esa en los próximos diez años (De una entrevista concedida por Ford a “Moving Picture World”)

El expresionismo alemán triunfó en Hollywood durante esta década de los años 20 y la Fox, la productora para quien trabajaba Ford, hizo todo lo posible para explotar el éxito que había conseguido con “Amanecer” de F. W. Murnau, pagándole a Ford y su esposa un viaje de dos meses por Alemania y Europa. Ford realiza con esta película un homenaje al cineasta alemán que no deja de ser una imitación del cine de Murnau. De hecho, los exteriores correspondientes a un pueblo alemán utilizados por Murnau para “Amanecer” son reutilizados por Ford para su película “Cuatro hijos” que está ambientada en su mayor parte en Alemania. Ford cuenta para esta película con su asiduo director de fotografía, George Schneiderman, que habiendo entendido la idea del director realiza un magnífico trabajo utilizando las luces y las sombras, al más puro estilo expresionista, y se arriesga, con el director, en complejos movimientos de cámara de los que tenemos buena muestra al principio del film, consiguiendo un derroche visual que supera a menudo la sencillez emocional de la historia. La interpretación de Margaret Mann como la madre es muy buena y supera en esos momentos el amaneramiento al que estaban sometidos los actores y las actrices para transmitir sentimientos en el cine mudo.